¿Duermes solo o con pareja? Un nuevo estudio ha comparado la calidad del sueño y la salud mental de las personas que duermen con su pareja, con aquellas que duermen en solitario. Aunque de primeras podemos pensar que dormir acompañado va a suponer despertarnos a mitad de la noche destapados o arrinconado en un lado de la cama, el estudio concluye que compartir cama con la pareja supone dormir mejor.
Los dos lados de la cama
Hace apenas unos días un estudio publicado en la revista Sleep exploró si compartir cama estaba asociado con la duración y la calidad del sueño. Los resultados están basados en las encuestas realizadas por 1.007 adultos de Pensilvania (EEUU).
Aspectos de salud mental como la depresión, ansiedad y estrés también fueron medidos y comparados en tres escenarios diferentes: dormir con pareja, dormir con hijos, dormir solos.
El Dr. Michael Grandner, director de Sleep and Health Reserach y autor principal del estudio, destaca cómo puede afectar cada uno de los tres escenarios citados a nuestra salud del sueño y salud mental. Los resultados eran dispares en función de con quién se compartía la cama o si se dormía en solitario.
Toda la cama para mí: dormir en solitario
Dormir en solitario suponía un mayor riesgo de insomnio y cansancio al día siguiente. También se correlacionaba con puntajes más altos de depresión, menos apoyo social y peor satisfacción con las relaciones y la vida en comparación a si se dormía con pareja.
Cuidado con el niño: dormir con hijos
Las personas que compartían cama con sus hijos mostraron mayor insomnio, menor control del sueño y mayor riesgo de apena de sueño. Dormir con niños se asoció también con niveles elevados de estrés respecto a si se dormía con pareja.
Échate para allá: dormir en pareja
Las personas que expusieron que compartían cama con su pareja "la mayoría de las noches" obtuvieron resultados más favorables en el insomnio, cantidad de horas durmiendo y calidad de esas horas. Se dormían más rápido y permanecían dormidos más tiempo, además de mostrar menor riesgo de apnea del sueño.
Este escenario también obtuvo mejores resultados en pruebas que medían la depresión, la ansiedad y el estrés. Asimismo mostraban mayor apoyo social y satisfacción con las relaciones y con la vida.
Puede que estés ahora pensando en ronquidos, en el calor que desprende tu pareja, y todos esos inconvenientes que pueden aparecer. Sin embargo, este estudio se apoya en otros que muestran como las parejas sincronizan sus movimientos durante el sueño y sus etapas del sueño.
En cualquier caso no son resultados concluyentes ya que se trata de encuestas y de correlación. Las encuestas pueden ser más o menos acertadas y la correlación no implica causalidad, es decir, dormir en pareja puede ser la causa de dormir mejor o puede no serlo.
Puedes ver ejemplos locos de dos situaciones que se correlacionan perfectamente, pero no tienen nada que ver. Por tanto, más que dormir en pareja, con hijos o en solitario, lo que afectará nuestra salud mental y del sueño es si nos encontramos felices con nuestra situación, sea la que sea.
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