Los tacos y platos semejantes son muy atractivos y siempre apetecen, quizá en parte por el atractivo de comer con las manos. Pero si queremos cuidar un poco lo que comemos, sobre todo después de las fiestas, lo normal es evitar las bases de hidratos como las tortillas y otros panes planos.
En ese caso podemos recurrir a las versátiles -y ligerísimas- hojas de lechuga para preparar unos tacos con ensalada cremosa de pollo y yogur, una receta muy versátil que además nos servirá como cocina de aprovechamiento de sobras.
Es ideal para aprovechar restos de pollo asado o pechugas que ya tengamos cocinadas, aunque siempre podemos prepararlas a propósito para este plato. Recomiendo hacer una salmuera previa para dejarlas más jugosas, y cocinarlas al vapor o al horno, que salen más sabrosas. O, simplemente, a la plancha.
En esta ocasión añadimos el crujiente y frescor del apio muy picado con la zanahoria rallada fina, texturas distintas que hacen más interesante cada bocado. La cremosidad y ligazón de la ensalada la aporta la mezcla de yogur, mostaza y aderezos, que, como siempre, se puede ajustar al gusto. Si preferís evitar totalmente la mayonesa, podéis usar queso crema o batido, o más yogur.
Si cocinamos desde cero el pollo, dejarlo en salmuera previamente en un recipiente cubierto con agua muy salada, como se describe aquí. Después, salpimentar y cocinar a la plancha, al vapor o en el horno, hasta dejar la carne bien hecha por dentro.
Dejar enfriar un poco y picar a cuchillo. Aparte lavar las verduras y pelar la zanahoria. Retirar los filamentos más gruesos y picar muy fino el apio con sus hojas. Rallar la zanahoria muy fina y picar el tomate.
Mezclar todo en una fuente con el pollo, añadir los ingredientes de la salsa y mezclar. Salpimentar y aderezar al gusto, mezclando suavemente hasta tener una combinación melosa homogénea. Probar y ajustar según nos guste más picante, con más limón...
Lavar y secar con suavidad unas hojas enteras de lechuga romana y rellenar con la mezcla de ensalada. Servir como si fueran tacos, o enrollar un poco para formar una especie de fajitas.
Con qué acompañar los tacos de lechuga con ensalada cremosa de pollo y yogur
Para mantener la textura de la base de lechuga en estos tacos de ensalada de pollo lo mejor es prepararlos al momento, aunque la ensalada se puede dejar lista con antelación. Una buena ración es saciante sin dejar de ser ligera, y podemos completarla con algo de fruta de postre o servir de primero una crema de verduras caliente.
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