Un descanso insuficiente o de mala calidad se ha vinculado a más hambre, menos saciedad y otros cambios que conducen al aumento de peso. En este, sentido un reciente estudio confirma que dormir más puede ser de mucha ayuda para adelgazar.
A más horas de sueño, menor ingesta energética
La investigación publicada en la revista JAMA Internal Medicine evaluó a 80 personas adultos sanos que dormían un promedio de 6,5 horas cada noche. Las mismas fueron separados al azar en un grupo de intervención, a los cuales se brindó una sesión individualizada sobre higiene del sueño con el objetivo de extender las horas de descanso a 8,5, o bien, fueron asignados a un grupo de control.
Las horas de descanso se midieron mediante actigrafía es decir, se fue controlando la actividad durante el sueño, mientras que el gasto calórico se evalúo con el método de agua doblemente marcada. Se les pidió a todos los participantes que no modificaran su rutina diaria así como tampoco se prescribieron dietas o ejercicios.
Tras dos semanas, el grupo de intervención logró extender sus horas de sueño en promedio de 1,2 horas y redujo su ingesta energética en un promedio de 270 calorías diarias.
No se observaron cambios significativos en el gasto energético así como tampoco en otros aspectos de la rutina diaria, lo cual se traduce en que dormir más horas puede favorecer un balance energético negativo o el déficit calórico y así, ser de gran utilidad para adelgazar.
Los mecanismos por los cuales dormir más cada noche puede conducir a una menor ingesta de calorías cada día son muchos. Entre ellos, menores niveles de estrés, mayores señales de saciedad y menores niveles de hormonas que estimulan el apetito.
Este estudio viene a confirmar que no solo dormir mal puede conducirnos al aumento de peso sino también, que dormir más y mejor puede ser de mucha utilidad y clave cuando buscamos adelgazar.
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